Le echamos una última instantánea a Cala Chica y por enésima vez, toca eludir el rompiente y encarar el cerro alternativo.
Viky, padeciendo el escarpado y severo terreno volcánico y acaso también, la irresponsable decisión y tibia sensatez de su dueño.
El bonito paisaje a recorrer que tenemos por delante
Salvando una vez más, un empinado cerro, en cuya cima obtenemos estas vistas tan bonitas, nos dirigimos ahora hacia la Cala del Barranco, denominada así por el ídem que se puede observar a nuestra derecha, y que resulta inconfundible por presentar una curiosa pared volcánica repleta de agujeros, evocando el mismo aspecto que el de un queso Grùyere.
La Cala del Barranco
Y a sus espaldas el Queso Grùyere
Ya se puede entender gráficamente mediante estas panorámicas, lo sencillo de superar estos pasos, por la playa, pegado al bajío, a diferencia de hacerlo por los sucesivos cerros, que como se puede observar en las siguientes imágenes, no se tratan precisamente de cerrillos.
Otra vez tenemos que sortear el arrecife por la loma más inmediata hasta dar vista a la emblemática Cala del Lance
(o del Lance del Perro), donde distinguimos unos carismáticos monolitos de columnas
supuestamente basálticas, en el centro de la playa, que le imprimen su caracter
diferenciador e inconfundible. A estas columnas solo les falta el teclado y el pedal para emular un órgano celestial.
Viky, dirigiéndose a interpretar Tocata y Fuga en re menor para órgano, de Johann Sebastian Bach. 
Ahora toca liberar a Yoda del zurrón para dejar nuestra particular impronta, nuestro exclusivo sello en esta emblemática playa almeriense.
Bonita estampa de Yoda blandiendo la bandera de España con el mar embravecido de fondo
En esta coqueta playa vemos interceptado una vez más nuestro avance por el litoral, causado en esta ocasión por una colada andesítica , que forma una muralla que impide el paso. Aquí no hay tu tía, tanto en bajamar como en pleamar el track indica que hay que eludir el obstáculo por una senda que franquea el cerro inmediato a nuestra derecha.
Aquí podemos observar a Viky adoptando una posición de "en guardia", erizándosele la melena ante la presencia de una Anaconda.
Desde la bonita playa del Barronal, se puede retroceder un
poco por la orilla y contemplar la Cala de los Basaltos, llamada así por
las columnas de basalto que en forma de cortina simula los tubos de un
órgano. Aunque al parecer, hay algún geólogo que opina que no existen formaciones de basalto en Cabo de Gata. (ver enlace dejado más arriba respecto de la colada andesítica) La contemplación de este muro junto al litoral resulta espectacular. La pequeña y coqueta playa presenta fácil acceso desde la emblemática playa de Monsul, que la tenemos muy cerquita de este punto. El delicioso recorrido por este tramo, merced al azul de las aguas, su transparencia, la marejada, el fragor de las olas, la húmeda brisa, las gaviotas etc, se convierte casi en una experiencia religiosa.
En realidad, el track que llevaba en el gps constaba de 28 kilómetros, entre ida y vuelta, teniendo como punto más alejado, antes de emprender el retorno, el Cerro del Aire, donde se halla enclavado el carismático Faro Cabo de Gata. Es por ello que dejamos pendientes de conocer, entre otros lugares, la Cala de la Media Luna, Cala Carbón, el Cerro de la Vela Blanca, Cala Rajada, Arrecife del Dedo, Cala Arena, Arrecife de las Sirenas y el faro ya mencionado. Pero esos emplazamientos los dejaremos para una próxima incursión por este maravilloso litoral almeriense. 
He aquí la famosa playa de Monsul.
La imagen de la playa de Monsul es seguramente la más emblemática del Parque. De arena oscura, llama la atención por su enorme duna viva, que según la dirección del viento cubre de arena una de sus paredes basálticas. Además veremos una enorme roca, como una lengua de lava, que invade parte de la playa y del agua. La playa está rodeada de erosionables paredes de lava, que caen sobre la playa en formas increíbles; éstas han formado oquedades donde caben varias personas y son un estupendo refugio del sol. Por su peculiaridad e irrepetible paisaje ha sido elegida para conocidas escenas cinemátográficas de "En busca del arca perdida", "Las aventuras del barón Münchhausen ", "Lawrence de Arabia" ó El hombre que perdió su sombra". Mónsul es perfectamente accesible en coche desde el camino de las playas que sale de San José, por lo que durante la Semana Santa y Agosto está muy "poblada", aunque no sufre la masificación de otras playas mediterráneas. Es un espacio virgen de enorme belleza para visitar y disfrutar en cualquier momento del año. También se puede hacer una excursión andando desde San José ó desde el Faro de Cabo de Gata, dos rutas a pie para disfrutar de la belleza del litoral y descubrir rincones que no son accesibles de otro modo. Estas excursiones son aconsejables fuera de los meses más calurosos del año y tienen varias horas de duración, por lo que se recomienda planificar el intinerario e ir provistos de agua y protección para el sol (gorro indispensable en verano). Es un lugar muy difícil de olvidar.
A la vista queda que la playa es preciosa.
FINAL SEGUNDA PARTE
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