17 diciembre 2012

COLL DEL LOBO-HOYA DEL CONEJO-PICO DE LA SELVA

Fantástica mañana de senderismo la que he vivido hoy, junto a estos falcotraileros, de los que, ahora mismo y sin más dilación, paso a hacer la debida presentación...
 De izquierda a derecha...
Alfonso, Jose, Sebastián, Marisa, Beatriz, Miguel Angel alias Falco, Ramón y la Viky que a estas alturas ya no necesita presentación.

Comenzaba a despuntar el día cuando hemos aparcado los coches. 

Desde Bullas se coge el camino asfaltado, pasando por el pasico de Ucenda, que nos lleva a Avilés y justo cuando llegamos a un mojón que parece un cipote gigante que dice el conde que está ahí, todo enhiesto, desde la edad media, sale un camino hacia la izquierda que hay que seguir unos metros hasta encontrar un anchurón a la derecha donde podemos dejar los coches.
 Esta ruta me la sugirió el marido de mi prima, y meterme en wikiloc e investigar, lo natural en estos casos.
Y hallar un track de esta ruta, la consecuencia subsiguiente.
Lo metí al garmin y en cuanto tuve oportunidad,  la hicimos mi Viky y yo.
Quedamos encantados. La ruta nos fascinó. 
Ya de por sí, parajes como el collado del lobo, la hoya del conejo, la selva, el coll del sudador...ummmmmm,...todo me parecía muy sugerente y tentador.
Y sobre todo me sorprendió la senda tan pateada que existe para hacer el recorrido. 
Se nota que está muy frecuentada y no me extraña porque el entorno es realmente encantador.
Y además, hasta llegar al punto geodésico del pico de la selva, podemos decir que es una subida ciertamente exigente, pues se sube desde los 900 metros hasta los 1500, más o menos.
Ello quiere decir que aquellos andarines esporádicos en situación de campaña "operación anticolesterol" deben abstenerse de embarcarse en una aventura así hasta tanto en cuanto no consigan un estado de forma más consistente porque de lo contrario, en algunos repechos, puedo asegurar y aseguro, que las pasarán canutas.
Antes de conocer esta ruta, siempre había subido a las antenas por la pista. Pero por el collado del lobo, la selva tiene otro color.

El impacto vistual de las antenas te perturba un poco y puede restar algunos gramos de fascinación a la ruta en su conjunto, pero la empinada senda nada más iniciar la ruta hasta la hoya del conejo y ya no digamos aquella otra por la cuerda de la selva...son para disfrutarlas arrobado, desde el principio hasta el final.
Mi intención era compartirla con mis amigos cehegineros, y hoy era el día marcado en el calendario para llevar a cabo la misión.

Aprovechando el tirón de la Falcotrail 2012, estos mákinas están que se suben por las paredes, pues atesoran un estado de forma absolutamente espectacular; tal es así que han comenzado a subir las primeras estribaciones hacia el collado del lobo a un ritmo demoledor, casi esquizofrénico.
¡Ehhhhh, tranquilos, tuve que exclamar yo, que no se llevan la ruta...que va a estar disponible toda la mañana reservada en exclusiva para nosotros...pero estos no paraban de darle a la singüeso y la respiración ni se les alteraba, como si tal cosa, como si estuvieran paseando por la vía verde, oye; tanto es así que he tenido que poner en práctica una vieja artimaña ciclista, colocándome el primero, para tratar de aminorarles el ritmo porque en verdad que estos falcotraileros me llevaban a pijo sacao...

El collado del lobo encuentro que es un sitio ideal para este próximo verano practicar un vivac...

Cuando hemos llegado al collado del lobo, las últimas luces del amanecer comenzaban a difuminarse...pero he sacado raudo la cámara de su encierro y me he puesto a disparar como un poseso...  
 Breve descansillo para cambiarle el agua al canario y la totovía, aprovechando la ocasión para tomarnos también unas fotillos de grupo...
 Nuestras amigas, siempre sonrientes...
 Sebastián es un tipo simpático, de los que piensan que...
"el tiempo es oro".
 Mi amigo Conde...esta mañana iba ligero de equipaje.
 Bea transmite siempre buenas vibraciones.
Su franca y embrujadora sonrisa se confunde con el verde y sereno paisaje.
 Y este parece un auténtico Ninja de la Selva...
 Aquí hacía un frío y viento del carajo...a veces pienso que mi Viky tiene que estar hasta las gónadas de su dueño. En la foto de arriba la vemos en actitud resignada, sufrida, aburrida, casi postergada, resistiendo con recio estoicismo, los avatares del incesante viento que la zarandeaban...si pudiera hablar, ¡cuánto no me reprocharía!
 Cada cual manipulando sus artefactos...
 Marisa, en su simpatía desbordante, erigiéndose como la auténtica reina de la cumbre...
 Todos con caras de estar más helados que el Yeti
 Sebastián y Viky, dos buenos amigos que saben posar como nadie.
  Departiendo en agradable cháchara en lo alto del sudador...
  Viky dejándose querer...
 Mi tocayo, disfrutando de las sensaciones...
 Aquí cada cual va a lo suyo, menos yo, que voy a lo mío...
¡HASTA LA PRÓXIMA AMIGOS!