Los Frailejones son un conjunto de roquedos y litosuelos sobre sustrato calizo-dolomítico en la vertiente norte de la Sierra de Mojantes. El lugar es fascinante pues las vistas desde aquí son imponentes y será muy probable ver posados sobre las crestas de esos pináculos, a los buitres leonados, oteando el horizonte.
Los paredones de los Frailejones del norte de Mojantes, lo mismo que Las Piedras del Reloj, Peña del Águila en Mojantes del sur, representan muy bien los procesos erosivos del agua, la temperatura y el viento sobre las rocas calizas.
Desde este lugar se goza de una panorámica envidiable
Finca de los Derramadores
Hacia los años 50, la escasez de carroña y los venenos de los cazadores les obligaron a trasladarse a espacios más elevados, fructíferos y tranquilos, como las vecinas serranías andaluzas y albaceteñas de Alcaraz, Segura, La Sagra, Las Villas y Cazorla.
En la imágen inferior podemos observar a una mamá buitre (es una apreciación aventurada) custodiando lo que parece un nido de buitrillico o pichoncico de buitre. (Me di cuenta de su existencia después, tras visionar las fotos en el monitor del pc)
En la imágen inferior podemos observar a una mamá buitre (es una apreciación aventurada) custodiando lo que parece un nido de buitrillico o pichoncico de buitre. (Me di cuenta de su existencia después, tras visionar las fotos en el monitor del pc)
Tras un paréntesis de veinte años, los buitres leonados (Gyps fulvus), regresaron a los cielos de Caravaca y de Lorca gracias al grupo ecologista Caralluma, que en la última década ha conseguido atraer a los buitres de Granada y Jaén a base de paciencia y de poner comederos y carroña para su reintroducción y crianza.
De no ser así, supongo que ya habrían tenido que emigrar hacia otras latitudes más propicias para ellos, ya que la carroña, abunda poco, al menos en los campos. De hecho los ganaderos se quejan de la innecesaria gestión, control y escrutinio por mor de prevenir la transmisión de enfermedades, a que las autoridades someten a las reses muertas por causa natural. ¡Con lo fácil que sería, habilitar lugares específicos para dárselas de comer a los buitres, como siempre se ha hecho...! Aducen intereses sacacuartos por parte de la administración.
Debido a su gran altura, aislamiento y óptima orientación al saliente del sol, los buitres de Mojantes anidan sobre todo en las Peñas del Águila y Piedras del Reloj, ubicadas en la cara sur de Mojantes; pero también lo hacen en los Frailejones.
Son muy significativas las manchas blancas que dejan en las rocas los excrementos de estas aves necrófagas.
Esta es Fortunata; nos hicimos amigos
Me brindó algunas buenas poses junto a su polluelo, pero nunca fui capaz de capturarla con las alas extendidas tal y como yo pretendía. Cada vez que salía volando, ¡zasca!, me pillaba desprevenido.
La pareja de Fortunata, Juanito, ejerciendo labores de vigilancia frente a la presencia humana y canina cercanas...
¡Vaya una vida más perra llevan los buitres!
Pluma de buitre
Abandonamos el frontal del Frailejón para abordarlo por detrás. En el trayecto, nos detenemos unos instantes para tomarnos unas fotos en el inmediato paraje de Punta Estrecha.
Si existe dios, definitivamente tiene que estar entre estos bonitos parajes de Mojantes. No es una presencia física, sino una idea, algo más allá de mi capacidad de comprensión. Algo más grande.
El sombrero de Indiana Jones ante el astro abrasador me viene que ni pintado.
El instintivo celo de una madre protegiendo a su pimpollo.
FINAL SEGUNDA PARTE
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