Esta mañana hemos hecho mi Viky y yo una rutica muy interesante.
Muy recomendable. Le tenía ganas a la ruta de Fuente Caputa y parafraseando a cierto ministro de infausto recuerdo, "manda güevos", que con lo cerca que la tenía, hasta el momento, aún no le había puesto el interés necesario para echarla a la buchaca.
Y me ha gustado. Es una ruta circular, 100% senderista, apta para todos los públicos, aunque hay que tener un mínimo de condición y fondo físico pues pasa de los quince kilómetros. Y tiene un poco de todo; bellas postales con que deleitar la vista; un espectacular viaducto que nos sorprenderá contemplar desde una perspectiva muy distinta a la habitual. También recorreremos pistas, caminos y deliciosas sendas que más que castigar, acariciarán nuestros pies. En el camino, también nos encontraremos con peliagudas paredes, frecuentadas por escaladores de alto nivel y agua...oh, sí, en esta ruta el agua será elemento protagonista y balsámica compañera de casi todo el recorrido.
Y si agua es sinónimo de VIDA, bien se puede decir que estamos ante una ruta de senderismo muy vivificante.
En todo caso, yo la he disfrutado, y si tú quieres hacerlo también, no tienes más que echarle un vistazo a este capazo de pixeles, que sin más preámbulos, libero de su encierro para que brillen con luz propia.
Le daremos un diez a la ruta que un tal Isidoro, cuelga en wikiloc.
Lo que sucede es que yo la he hecho al revés. A veces me suele ocurrir, que no reparo en ese detalle y cuando me vengo a dar cuenta, trazo el círculo al contrario de como propone el autor del track. Pero en el caso que nos ocupa, me da a mí que la ruta queda más bonita haciéndola con el giro al contrario de las agujas del reloj. Se puede decir que el sentido del giro no ha de alterar el producto final del recorrido, pero al ir regresando al punto de partida, el mejor tramo con vistas hacia el pantano, queda mejor, tenerlo de frente que a la espalda. En todo caso, vamos a comenzarla y a ver que nos va pareciendo sobre la marcha.
He pasado por el puente unas cuantas veces, por encima, se entiende, no se, muchas, tropecientas mil, pero por debajo, "era mi primera vez". Y le da a uno que pensar que el hombre sea capaz de idear y construir tan monumentales infraestructuras. El ser humano, capaz de lo mejor, y también de lo peor. Qué obra más colosal...de ahora en adelante, cuando cruce en burro, coche o moto este puente, no podré evitar visualizarme a mí mismo desde abajo...
Comenzamos a ganar altura a través de un monte que nos ofrece unas vistas del viaducto verdaderamente espectaculares.
En el track de nuestro amigo Isidoro, este tramo, lo bajan pero yo considero, que dada su inclinación y lo intrincado del sendero que por la abundante broza, apenas es visible, es más adecuado subirlo que bajarlo.
En todo caso, el track es perfecto, y se nota que el autor conoce muy bien el recorrido, no desviándose del sendero ni un ápice. Después de una ascensión no demasiado dificultosa de unos cientos de metros, se llega a la cima para comenzar a bajar hasta conectar con un camino que nos conduce a la rambla de Perea.
Unos enormes y mayestáticos centinelas con aspecto de tinajas nos piden la acreditación, autorizándonos el paso y dándonos la bienvenida acto seguido después...
Es la rambla de Perea uno de esos entornos que tanto gustan a los senderistas por lo delicioso y placentero de su andar.
Nada más adentrarme en la rambla, me llama la atención una pared rocosa realmente magnífica. Y cuando llego a su altura, aunque ahora desierta, me doy cuenta que debe ser un lugar muy frecuentado por escaladores, pues está sembrada de puntos de anclaje, mosquetones y cintas express, conformando las diferentes vías abiertas en la roca. Más tarde, a pocos metros del final de la ruta, converso durante unos minutos con un madrileño, que está con unos amigos practicando en las paredes del pantano de la Cierva, que me dice, que las vías abiertas en esa pared de la rambla Perea, son de reciente creación y tienen el atractivo de que atesoran un grado de dificultad máximo, me hablaba de un 9A+, creo recordar, de ahí que resulten paredes muy solicitadas.
Al parecer, tenemos en Murcia, ya lo decía Miguel Angel García Gallego, de los mejores lugares del mundo para escalar.
De ahí que haya sido y sea nuestra región, cuna de tan buenos y expertos escaladores.
Al parecer, tenemos en Murcia, ya lo decía Miguel Angel García Gallego, de los mejores lugares del mundo para escalar.
De ahí que haya sido y sea nuestra región, cuna de tan buenos y expertos escaladores.
Pero hay que seguir adelante, así que, dejo atrás las paredes y continúo avanzando...
Seguimos, ora por un camino, ora por una senda, y llegamos a la famosa poza de la fuente Caputa, que he visto muchas veces en fotografías, y que en verano, suele estar bastante frecuentada y ahora me explico por qué. El lugar es una delicia.
Después de andar durante un buen trecho por un agradable PR, municipalmente señalizado, hacemos un giro de 170º y cogemos un camino en subida, muy pedregoso en dirección a Majada de las Vacas, que me tomo en serio y aprieto el paso, más que nada por sudar la camiseta, que ya está bien de tanto zanganeo.
Al llegar a Majada, brusco giro a la derecha para coger un bonito sendero en descenso, con interesantes vistas hacia la autovía.
El gepese cumple maravillosamente su cometido, gracias a la exactitud del trazado que nos brinda nuestro amigo Isidoro, y al llegar a la altura de la autovía, hacemos un corto tramo de vía de servicio en dirección Caravaca, para cruzarla a través de un puente subterráneo que nos traslada hacia el otro lado.
Cogemos un camino que va enfilando hacia el pantano. Ya en sus inmediaciones, desembocamos en una encantadora senda, de lo mejor de este bonito recorrido, que comienza a abordarlo desde el otro lado.
Este tramo de la ruta es visualmente muy agradable. Para disfrutarlo. Y después de comprobar como Pedro y María dejaron indelebles en el chopo, su particular y romántico testimonio de amor eterno, nos tropezamos con unos madrileños, dos parejas, que están estos días de vacaciones, practicando la escalada en nuestra región.
Andrés, es un chico muy simpático con el que hablo durante unos minutos, que dice ser profesor de escalada y por tanto "vivir de esto". Parece conocer nuestra región, bastante mejor que yo.
Continúo mi camino, comprobando en el gepese, que a 200m de zoom, ya se ve la punta final del recorrido.
Hay que estar atentos porque nada más cruzar la presa, hay que introducirse por una senda hacia la izquierda que sigue bordeando el pantano. No me gusta ver la mierda que deja la gente guarra.
Es un lugar ideal para enamorados, con excelentes vistas hacia el pantano y la presa, semiocultos por frondosos árboles, a salvo de miradas indiscretas, pero está todo tan sembrado de porquería, que deslucen lugar tan coqueto. Entre tanta gente cívica y concienciada, con el respeto al medio ambiente, siempre existirán otros que les importará un pedo de violinista, el sembrar de inmundicias el campo. En la zona, existen diseminados por doquier, cascos vacíos de litronas, clines, bolsas de patatas fritas, y algunas latas de cerveza, amén de otras muestras de residuos gorrinos.
Pero después de este pequeño deslustre en la ruta, que no merece ser tenido en cuenta, continúo mi camino por una senda oblícua que requerirá toda nuestra atención si no queremos resbalar y acabar sumergidos en el pantano.
Como espero se ha podido comprobar mediante las imágenes, esta ruta discurre por un entorno realmente privilegiado. Por un vergel por así decir. Porque no es habitual encontrar en nuestra región, si exceptuamos la zona alta del río Segura, tanta agua a nuestro paso.
Paseo que espero repetir hacia la primavera, llegando esta vez sí, hacia el verdadero nacimiento de Fuente Caputa, eludiendo quizás, el paso por el pantano, para aprovechar y darme sendos baños en las dos hermosas pozas que ya han quedado reseñadas en esta nueva aventura senderista, que espero haya sido de tu agrado.
¡HASTA LA PRÓXIMA AMIGOS!
Seguimos, ora por un camino, ora por una senda, y llegamos a la famosa poza de la fuente Caputa, que he visto muchas veces en fotografías, y que en verano, suele estar bastante frecuentada y ahora me explico por qué. El lugar es una delicia.
Después de andar durante un buen trecho por un agradable PR, municipalmente señalizado, hacemos un giro de 170º y cogemos un camino en subida, muy pedregoso en dirección a Majada de las Vacas, que me tomo en serio y aprieto el paso, más que nada por sudar la camiseta, que ya está bien de tanto zanganeo.
Al llegar a Majada, brusco giro a la derecha para coger un bonito sendero en descenso, con interesantes vistas hacia la autovía.
El gepese cumple maravillosamente su cometido, gracias a la exactitud del trazado que nos brinda nuestro amigo Isidoro, y al llegar a la altura de la autovía, hacemos un corto tramo de vía de servicio en dirección Caravaca, para cruzarla a través de un puente subterráneo que nos traslada hacia el otro lado.
Cogemos un camino que va enfilando hacia el pantano. Ya en sus inmediaciones, desembocamos en una encantadora senda, de lo mejor de este bonito recorrido, que comienza a abordarlo desde el otro lado.
Este tramo de la ruta es visualmente muy agradable. Para disfrutarlo. Y después de comprobar como Pedro y María dejaron indelebles en el chopo, su particular y romántico testimonio de amor eterno, nos tropezamos con unos madrileños, dos parejas, que están estos días de vacaciones, practicando la escalada en nuestra región.
Andrés, es un chico muy simpático con el que hablo durante unos minutos, que dice ser profesor de escalada y por tanto "vivir de esto". Parece conocer nuestra región, bastante mejor que yo.
Continúo mi camino, comprobando en el gepese, que a 200m de zoom, ya se ve la punta final del recorrido.
Hay que estar atentos porque nada más cruzar la presa, hay que introducirse por una senda hacia la izquierda que sigue bordeando el pantano. No me gusta ver la mierda que deja la gente guarra.
Es un lugar ideal para enamorados, con excelentes vistas hacia el pantano y la presa, semiocultos por frondosos árboles, a salvo de miradas indiscretas, pero está todo tan sembrado de porquería, que deslucen lugar tan coqueto. Entre tanta gente cívica y concienciada, con el respeto al medio ambiente, siempre existirán otros que les importará un pedo de violinista, el sembrar de inmundicias el campo. En la zona, existen diseminados por doquier, cascos vacíos de litronas, clines, bolsas de patatas fritas, y algunas latas de cerveza, amén de otras muestras de residuos gorrinos.
Pero después de este pequeño deslustre en la ruta, que no merece ser tenido en cuenta, continúo mi camino por una senda oblícua que requerirá toda nuestra atención si no queremos resbalar y acabar sumergidos en el pantano.
Como espero se ha podido comprobar mediante las imágenes, esta ruta discurre por un entorno realmente privilegiado. Por un vergel por así decir. Porque no es habitual encontrar en nuestra región, si exceptuamos la zona alta del río Segura, tanta agua a nuestro paso.
Paseo que espero repetir hacia la primavera, llegando esta vez sí, hacia el verdadero nacimiento de Fuente Caputa, eludiendo quizás, el paso por el pantano, para aprovechar y darme sendos baños en las dos hermosas pozas que ya han quedado reseñadas en esta nueva aventura senderista, que espero haya sido de tu agrado.
¡HASTA LA PRÓXIMA AMIGOS!
No hay comentarios:
Publicar un comentario