28 febrero 2020

SIERRA DE LA CABEZA DEL ASNO (CIEZA) I

A la sierra de la cabeza del Asno ya hace tiempo que le tenía ganas. No en vano, durante muchos años, he transitado la carretera que discurre paralela a la sierra del Puerto y su continuación que es la que nos ocupa. En la sierra del Puerto se encuentra enclavada la cavidad subterránea de mayor recorrido horizontal de la Región de Murcia, la que se conoce como Cueva del Puerto, un lugar digno de admirar que bien vale una visita. (fotos gentileza de san Google)
Hacia la montaña de tan curioso nombre, siempre se me iba la mirada camino de Jumilla o tomando dirección Albacete-Madrid. Desde la legendaria Venta del Olivo, es la prominencia orográfica que más llama la atención. Por ello, aguardaba su momento, permaneciendo en lista de espera. Pero hace unos días, cuando regresaba del Volcán de Cancarix, la Cabeza del Asno se me puso de nuevo a tiro de pupila y me prometí a mí mismo que tenía que hollarla cuanto antes. El arranque definitivo que me hizo ponerme en marcha y explorar la sierra de una vez por todas lo obtuve de una reseña que leí en Internet mientras buscaba información acerca de Medina Siyâsa. Y es que en esta sierra y sus alrededores, anduvieron escondidos dos maquis, cuya historia, abordaremos más adelante. 

Mi punto de partida no fue como indica el trazo azul sobre el mapa, ya que, en función de mi procedencia, me conecto al track, antes o después, según me convenga.
Por tanto, en mi caso, en vez de salir desde el albergue Picarcho, antes de cruzar la rambla del Agua Amarga, frente a la más llamativa arista Este de la sierra, yo lo hice, cruzando Charco Lentisco, desde la RM 714, por un camino de tierra muy bacheado, hasta llegar al paraje Agua Amarga, muy cerquita del gran pantano que ya observamos en la imagen cuasi cenital de Google Earth capturada desde el oeste.
La sierra observada desde otro ángulo.
La sierra observada desde las inmediaciones del albergue. 
(Foto de Internet)
Me he informado por los colegas de Wikiloc que no es una sierra muy transitada y que no existen sendas propiamente dichas, es decir, que la mayor parte del recorrido discurre campo a través, excepción hecha del tramo final que marcha por el camino del Altiplano (de la Vera cruz GR-251). Que hay que llevar cuidado con los traspiés y que una vez en la cuerda, habrá que trepar y destrepar algunos tramos, mientras se evoluciona por la cresta. Nada nuevo bajo el sol. Avisan también que la bajada por la ladera, en la cara norte, es por terreno suelto y con mucho matorral arañante y pinchante. Nada que nos sorprenda pues no seré yo el que a estas alturas subestime ningún cerro murciano, por modesto y humilde que este pueda parecer a priori.  
Hace una mañana de febrero (domingo) preciosa. Se pronostica que la temperatura alcance los 20ºC y el viento será flojo de levante. Quiero llegar a tiempo para comer en casa, así que, aunque no he madrugado, no creo que completar el recorrido, entre pitos y flautas fotos y tal, me lleve más de cuatro horas.
La imagen que ofrece la Cabeza del Asno desde la solana es bravía. Me gusta porque alcanzar su cima nos costará algo de esfuerzo. Matar varios pájaros de un tiro es lo suyo; naturaleza, paisajes, música, fotos y actividad anticolesterol, etc. ¡A ver, pero canastos, si aquello es...!; no había andado aún doscientos metros y necesito cerciorarme...me descuelgo la mochila y saco los prismáticos. En efecto, ya desde abajo se vislumbra el tubo del vértice geodésico y por las barbas de Abascal que tiene que tratarse de un pedazo mojonaco de considerable alzada.
No hay caminos ni sendas que yo identifique como tales pero el progreso a través del extenso espartizal resulta ameno y llevadero. Ya adivinamos en la depresión, por donde discurrirá la subida. 
Y sabemos que tendremos que trepar un poquito. Trepadas fáciles, sin apenas exposición. Divertidas, asequibles para todo tipo de senderistas, por mataos o negaos que estos sean. 
Como ya hemos alcanzando cierta altura, vamos obteniendo y confirmando alguna referencia sobre el manto acuífero que sabemos atesora esta comarca.
La sierra del Puerto y su prolongación Cabeza del Asno, se encuentra entre los términos municipales de Calasparra y Cieza. Puerta natural de la actual Región de Murcia por el norte hacia la Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha. Posee una extensión de 18 km de longitud entre el extremo más occidental, que se denomina Cerro de las Rotas (Calasparra) y el borde más oriental llamado Cabezo del Asno (Cieza). Con una altitud sobre el nivel medio del mar de 765,20 m. Su Vértice Geodésico pertenece a la zona externa de las Cordilleras Béticas, más concretamente al Prebético externo. Los materiales predominantes son: dolomías, calizas, arenas, areniscas, conglomerados y margas. Es posible observar en su piedemonte un magnifico Glacis de derrame o de acumulación (superficie de erosión de pendiente suave situada al pie de zonas montañosas en regiones semiáridas) con interés geomorfológico.
El interés hidrogeológico de este paraje ciezano, también es notable, ya que en su subsuelo se encuentra parte de él «El sistema hidrogeológico del sinclinal de Calasparra”. Que se extiende desde esta población hasta próximo a Jumilla, con 330 km2 de extensión del sistema acuífero.

Como curiosidad mineralógica, hemos observado que en la falda norte de la Sierra de la Cabeza, existen unas antiguas explotaciones de Hierro, que se explotaron hasta los años veinte del siglo pasado. Son pequeñas galerías excavadas y que junto a ellas se apilan escombreras con Siderita, Gohetita, limonitas. Además de pequeños depósitos de diatomita o tierra de diatomeas en la rambla del Agua Amarga y el Puerto de la Mala Mujer.
A la derecha de esta quebrada iniciaremos el ataque final hacia la cresta y desde esta, a poco que andemos unos cientos de metros, alcanzaremos el vértice. Lo vamos divisando en todo momento y el progreso es sencillo, de terreno amable, poco abrupto, asequible.
Sabemos que a la vuelta, habremos de ir evolucionando por entre aquellas crestas. 
Sierra del Picacho y en la lejanía, apenas distinguible a su derecha, la sierra del Buey (Jumilla).
Cuando se camina solo o si, acompañado, en silencio, sin entregarse a la ruidosa cháchara, resulta más probable sorprender a las criaturas evolucionando en su hábitat. Apenas tuve tiempo de encender la cámara y disparar, aunque pude atrapar a las más rezagadas. Siempre resulta un espectáculo contemplarles con la agilidad, gracia y belleza de que hacen gala en sus dominios.
¡Venga, no te hagas el remolón y aprieta el paso, que con el rollo de la cámara te dan las uvas y llegas tarde para la comida en casa!
¡Pero qué prisas son esas hombre...?
La ruta está chula y si eres un senderista murciano que se precia de serlo, esta muesca en la culata de tu mágnum 44 rutero, no puede quedar sin marcar.  
El Almorchón, siempre omnipresente...
Ya se hace uno la idea del verdadero brazo de mar de agua dulce que tiene que recorrer el subsuelo, desde Calasparra a Jumilla.
Capturando los alrededores, enfocando hacia Castilla La Mancha
El Camino de la Vera cruz entre la sierra del Puerto y bancales del Canalón y de García.
Enfocando hacia Agramón
Explotaciones agropecuarias
Con el zoom atraemos lo que podemos las paredes del Pitón de Cancarix y la sierra de las Cabras, que ya hemos conocido.
Apenas nos restan unos metros para alcanzar el vértice
Desde esta toma se aprecia bien la existencia del collado del Chatres, que divide en dos a la sierra del Puerto que viene desde Cuevas Blancas.
Ya colegíamos nosotros desde abajo, que el mojón no era cualquier cosa. Dejamos colgada la mochila, y nos acercamos al cortado este, a ver si podemos capturar algún buen paisaje.
Por ahí abajo, por entre la rambla del Agua Amarga, La Melera y el Puerto de la Mala Mujer, se produjo un tiroteo entre los maquis y la guardia civil, resultando del enfrentamiento, que los idealistas aventureros lograron escapar, pero no así, tiempo después, no muy lejos de aquí en que, tras otro enfrentamiento con la benemérita, resultaron muertos. Ha llegado el momento de relatar su historia.

Gracias a la intrincada orografía de la Sierra del Puerto y de la Cabeza del Asno, al finalizar la Guerra Civil Española, fue campo de actuación de dos maquis, (la palabra proviene del vocablo francés maquis, que viene a su vez del corso y del italiano macchia, que equivale a paisaje de arbustos, matorrales etc.
 El régimen Franquista los denominaba, «huidos», calificando como tales a aquellos resistentes armados que abandonaban sus localidades de residencia, ocultándose en campos y sierras sustrayéndose a la acción represiva y a la Justicia. 
Estas personas, de diversas ideologías políticas, tenían el denominador común de su vinculación con la vencida causa Republicana y el inmediato objetivo de sobrevivir a la derrota. Esta partida guerrillera la formaba: Andrés Lara Duro (a) «Larita» y Cándido Jiménez Herreros (a) «Timoteo», (de profesión jornaleros) naturales de Agramón (Hellín).
Andrés Lara Duro comienza su actividad guerrillera, con 26 años, finalizada la guerra, siendo en 1.940 detenido e internado en un campo de concentración de trabajo en Madrid. Evadiéndose del mismo, contactó y actuó con grupos de guerrilleros de la provincia de Valencia. Tras abandonar estas partidas, se estableció en la zona de Hellín, Cieza y Jumilla en compañía de Cándido Jiménez Herreros. Sus actuaciones se combinaban, entre el aprovisionamiento de víveres y armas que facilitaban su supervivencia, y actividades guerrilleras. Andrés Lara era un gran conocedor de la zona, astuto y ágil, lo que le permitió, con el apoyo de amistades de la comarca, eludir la persecución de que era objeto por parte de la Guardia Civil, como la que tuvo lugar en el paraje de la Rambla del Agua Amarga (Cieza), donde las fuerzas del régimen no pudieron arrestar a estos guerrilleros, que desaparecieron en la oscuridad de la noche tras un fuerte tiroteo.

La benemérita concibió una estratagema consistente en contactar con él, a través de una persona que por sus antecedentes políticos fuera de su confianza. Debería enviarle la propuesta de la creación en la comarca de Agramón de un comité de resistencia encargado de apoyar y controlar la acción guerrillera de aquella comarca. Tras el oportuno contacto, aceptaron la propuesta de unirse a la supuesta guerrilla que la organización política le enviaría. Fijando día, hora y lugar de encuentro. Realizado el mismo el día 2 de Febrero de 1.950 en el paraje Pocico del Pelícano en el límite provincial de Albacete y Murcia, cerca de las Minas de la Celia, en el término municipal de Jumilla. A la cita se personó una contrapartida de la Guardia Civil, convenientemente caracterizado de guerrilleros, compuesta por un sargento y seis guardias. Al levantar la partida, ante las sospechas de los «huidos» se produjo un enfrentamiento en el que resultaron muertos ambos maquis.
Desde nuestra bonita atalaya, fotografiamos el orondo mojón.
Cabezo del Puerto, Cabeza de las Ventanas, Rincón de la Mina, Sierra del Picacho, etc.
En la mochila, para la sierra de la Cabeza del Asno echamos tres cedés de música. Nos encanta la brasileña Eliane Elias, no solo por la excepcional pianista y buena cantante que viene siendo desde hace mucho tiempo sino también por lo guapísima que es. Diane Schuur también nos parece una buena intérprete de Jazz, que hace sus buenos pinitos con el soul y el blues, la cual hemos disfrutado en directo en los festivales de Jazz, de Vitoria y San Javier. Enlazamos unos cuantos deliciosos temas de una y otra, sin miserias, pues total, nos van a cobrar lo mismo.



















FINAL PRIMERA PARTE

No hay comentarios:

Publicar un comentario